Constantemente hablamos con nuestros clientes de la importancia del posicionamiento web a la hora del trabajo sobre una página web. Evidentemente, debe ser un factor esencial a la hora de construir la estrategia de marketing digital en cualquier negocio. Crear tráfico hacia la web es un valor que tiene que ser fundamental y de ello hemos hablado en otros posts. No obstante, qué ocurre cuando tengo el tráfico que esperaba o que creo que debería ser suficiente y, sin embargo no consigo transformar esos visitantes en clientes o al menos, en visitantes asiduos. ¿Por qué tengo visitantes que entran a mi web e inmediatamente se van y nunca más vuelven a entrar? Es mucho el trabajo que le dedicamos a nuestra web como para no tener una tasa de transformación suficientemente digna para considerar tanto esfuerzo como algo rentable. Os traemos un listado de factores que pueden afectar de manera considerable a que tu web no consiga retener y fidelizar a las personas que la visitan. Puedes chequearla y comprobar cómo está tu sitio en cada uno de los aspectos.
1. Diseño Anticuado
Juzgamos los libros por las portadas, a las personas por su aspecto físico y a las web por su diseño. Si tu web es anticuada, tu contenido se verá anticuado… aunque no lo sea. En un estudio realizado por la Dra. Elizabeth Sillence sobre la confianza que le provocaban a los visitantes un determinado número de páginas web. En un 94% de los casos la falta de confianza en los contenidos de la web estaba relacionada con un diseño web poco atractivo. No sólo hay que ofrecer contenido adecuado, también hay que envolverlo en un paquete bonito.
2. Contenido difícil de leer
Las fuentes que utiliza, así como los colores del texto y el fondo, pueden determinar la facilidad con la gente puede leer y digerir el contenido de su sitio web. Si no se puede leer fácilmente parece claro que difícilmente vamos a convertir a esos visitantes en clientes. Sobre colores, utiliza contrastes fuertes y limpios entre fondo y letra. Con respecto al tamaño, para los titulares, utiliza un tamaño de fuente de 22 píxeles o más grande. Para el cuerpo del texto, a partir de 14px.
3. Páginas cargadas de publicidad
Aunque en tu estrategia de monetización de la web hayas visto como necesario insertar publicidad, es importante que tengas en cuenta que el cliente entra en tu página por los contenidos que les ofreces, no para ver publicidad. En el Informe Nielsen de publicidad de 2014, los participantes advirtieron que la publicidad de banners en páginas webs es la que más desconfianza provoca con respecto a cualquier otro tipo de publicidad. Piensa bien antes de colocar publicidad en tu web, dónde y cuánta.
4. Los videos de reproducción automática
Si tienes un vídeo de reproducción automática, corres el riesgo de que tu visitante le dé a “Atrás” con suma facilidad, ya que el consumidor web cada vez ve con peores ojos actitudes intrusivas en su navegación. Además, es muy posible que tu página no cargue lo rápido que tu esperabas y una página lenta… es un visitante menos.
5. Navegar por tu web es difícil y confuso.
Levantad la mano si esto os ha sucedido: llegas a sitio web en busca de una pieza específica de información, sólo para quedar atrapados en un laberinto interminable de opciones de navegación mal establecidos y volviendo otra vez al buscador para ir a algún sitio donde no haya que realizar la búsqueda del tesoro. La regla de oro de la navegación es la siguiente: Piensa a través de la configuración de tu sitio como si fueras un visitante externo. Si fueras alguien que visita por primera vez la página, ¿cómo haría para encontrar la información organizada? ¿Qué medidas tomarías para encontrar la información que va a responder a tus preguntas? Para reorganizar tu navegación y la estructura de tus menús te ayudará tener en cuenta las necesidades de tu usuario y dejarás de perder clientes potenciales debido a la mala organización del contenido.
6. Tus requisitos de registro son complicados (o demasiados)
El tener una zona de registro, en ocasiones, puede ser un buen elemento de conversión para ofrecer servicios exclusivos y provocar un mayor grado de conversión. En cuanto a las ventas online, no sólo es aconsejable sino que en muchos casos es imprescindible. Intenta reducir al máximo el número de campos que tengan que rellenar tus usuarios y pónselo fácil. Si crees que no puedes reducirlo, recuerda el caso de Expedia que tras reducir un campo en su formulario de registro, consideró que le reportó 12 millones de facturación extra por hacerlo.
7. Tu web carga muy lentamente.
La investigación de KISSmetrics informa de que los tiempos de carga son fundamentales cuando se trata de analizar el rendimiento de cualquier sitio web. Estas son algunas de las estadísticas clave de su análisis:
El 47% de los consumidores esperan como máximo una página Web que cargue en dos segundos o menos.
El 40% abandonan un sitio web que lleva más de tres segundos en cargar.
Incluso un retraso de un segundo disminuye la satisfacción del cliente en un 16%.
Si no lo has comprobado, chequéalo de inmediato. Si ya te has dado cuenta y tienes que mejorar este aspecto, ponlo en primer lugar en tu listado de prioridades.
8. Tu web no es responsive
Olvidándonos incluso del SEO y del cambio de algoritmo de Google, por el que es más que probable que si tu web no está adaptada a los dispositivos móviles, pierda posición en la búsqueda orgánica, es imprescindible que tu sitio esté adaptado a cualquier dispositivo móvil. Según la investigación recogida por Mobify, “30% de los compradores móviles abandonar una transacción si la experiencia no está optimizado para móviles.” La transición hacia un sitio adaptado y responsive, puede ser un verdadero dolor de cabeza, pero ¿realmente puedes permitirte este nivel de destrucción de tu ratio de conversión?
9. Las promesas no corresponden con el contenido
Piensa bien si lo que teóricamente ofreces es lo que das cuando tu visitante llega a la página de destino. No pienses sólo en el SEO a la hora de trabajar los títulos de la web, piensa si realmente das a tus visitantes lo que parecía que andaban buscando cuando decidieron entrar a tu página buscando tal o cual servicio o contenido. Si esto no es así, tu porcentaje de rebote subirá escandalosamente y perderás rápidamente cualquier oportunidad de conversión.
10. No utilizar Call to Action
Las investigación realizada por Small Business Trends afirma que el 80% de pequeños necios B2B carecían de llamadas a la acción y botones actualizados hacia la conversión. Piensa que esto es como tener una tienda física y no tener una caja donde formalizar las compras. No hay que esperar que el cliente solicite el servicio o el producto, he de ofrecérselo yo. Por ello, termina tu página de ventas, tu entrada de blog, o tu página de producto con una convincente y relevante llamada a la acción para que te tengan en cuenta.
Por último, y siguiendo la línea de este último consejo, en Resolving podemos ayudarte con tu web en estos aspectos o cualquier otro que puedas imaginar. Contacta con nosotros y nos pondremos en contacto contigo sin ningún tipo de compromiso.